Bienestar integral: Medicina Estética en la Tercera Edad

Bienestar integral: Medicina Estética en la Tercera Edad

Medicina Estética

Las mujeres de 80 años han aumentado en un 100% sus visitas a centros y clínicas de medicina estética en los últimos cinco años, según datos de expertos reunidos recientemente en Barcelona con motivo de XXV Congreso Nacional de la Sociedad Española de Medicina Estética (SEME).

Según Jaime Tufet, miembro del Comité Organizador del Congreso, “en los últimos años ha habido un aumento espectacular de personas mayores de 80 años que acuden a nuestras visitas a realizar tratamientos de belleza, estamos ante una revolución que nunca antes se había visto en España”. En este sentido, Tufet señala que en la mayoría (cercano al 70 por ciento) de los casos vienen recomendadas por las hijas que ya han recibido tratamientos de estética en un centro.

“Las expectativas de vida han aumentado en nuestra sociedad y nuestros mayores consideran cada vez más la importancia de mantener un equilibrio entre la salud y la belleza”, señala Concha Obregón, miembro del Comité Organizador del Congreso, quién añade que “en este momento estamos haciendo muchos tratamientos para la eliminación de manchas y realizando un gran número de rellenos no permanentes, entre otros. Nuestras ancianas empiezan a considerar la importancia de retrasar su envejecimiento.

La edad física, en la mayoría de los casos, no corresponde con la edad mental de estas personas y en gran parte es debido a que a lo largo de su vida bien por desconocimiento bien por capacidad económica en su juventud (postguerra) no tuvieron acceso a los tratamientos de belleza”.”Cada vez es más importante equilibrar la salud al aspecto externo”, concluye Obregón.

En este sentido, Jaime Tufet señala que “también ha sido importante las nuevas tecnologías que antes no existían. En los últimos cinco años hemos tenido en el sector un importante desarrollo tecnológico que ha hecho accesible y muy eficaz los tratamientos de rejuvenecimiento (nuevos láser, radiofrecuencia, etc.), así como nuevos productos químicos mucho más eficientes”.

“El hecho de que nuestros ancianos se preocupen por su aspecto y que puedan acceder a los tratamientos es un signo de madurez y de salud de nuestra sociedad. En gran medida, esta accesibilidad ha venido propiciada por el estado de bienestar que nos hemos dado y que debemos de conservar”, señala Tufet que añade que “quitarse una mancha de la cara en una persona de 80 años hoy en día se está convirtiendo en algo habitual, como ir a la peluquería”.

Por su parte, Concha Obregón comenta que si bien el 70 por ciento de las mujeres de 80 años van a una consulta de un médico de estética vienen prescritas por sus madres, ocurre algo parecido con las visitas de mujeres menores de 40 años (en este caso un 60 por ciento). Obregón afirma que en este caso el objetivo no es tanto el de reparar la piel sino el de mejorar el aspecto y prevenir el envejecimiento futuro. “Empezar a cuidarse antes de los 40 significa que al menos se obtiene una década de juventud”, dice Concha Obregón.

Fuente: medicinatv.com

Tercera Edad
Entrada anterior
Descubren cómo las células, aunque mueran, mantienen el pigmento del tatuaje
Entrada siguiente
La tendencia en tratamientos estéticos