Un papiloma cutáneo es un crecimiento blando y del color de la piel que cuelga desde la superficie de la piel sobre una pequeña porción de tejido llamada tallo. Su nombre médico es acrocordón. Los papilomas cutáneos no son cáncer de piel ni pueden volverse cáncer de piel.
Aparecen típicamente a medida que las personas envejecen. Son más comunes en personas de 60 años o mayores. Los papilomas cutáneos podrían ser hereditarios. Además se forman generalmente después del embarazo.
Aparecen más comúnmente en los pliegues de la piel del cuello, axilas, torso, debajo de las mamas o en la región de los genitales. Pueden irritarse si aparecen en una región donde hay fricción por el contacto con la ropa o con alhajas y son un problema estético importante.
Síntomas
En un principio, un papiloma cutáneo podría aparecer como un bulto pequeñísimo y blando sobre la piel. Con el tiempo, este bulto adquiere el color de la piel y cuelga de la superficie de la misma a través del tallo. Es fácil mover o menear de un lado al otro un papiloma cutáneo. El papiloma cutáneo es indoloro, aunque puede irritarse si se le frota mucho.
Si un papiloma cutáneo se dobla a la altura del tallo, puede formarse un coágulo de sangre dentro de este tallo y podría volverse doloroso.
Tratamiento
Un método muy eficaz para eliminar los acrocordones es cauterizarlos con un cauterio eléctrico en el consultorio del médico. Esto hará que el acrocordón se vuelva negro y se desprenda casi de inmediato o en un par de días.
Se debe tener en cuenta que, extirpar un acrocordón no garantiza que no vuelva a crecer ni impide el crecimiento de acrocordones nuevos en otros lugares.
En MedStetic trabajamos con este tipo de tratamientos para eliminarlos de forma eficaz y segura.
Fuente: healthline.com
