Usos de la Vitamina C

Medicina Estética

La suplementación de la Vitamina C posee diversos usos; en la piel, se utiliza para tratar las úlceras, quemaduras y daños, debido a su capacidad de estimular la formación del colágeno.

Vitamina C en el tratamiento contra el cáncer

Las altas dosis de la vitamina C se utilizan como tratamiento complementario para el cáncer debido a las conclusiones de investigaciones que indican que podrían reducir el incremento y la proliferación de células cancerosas en cáncer de próstata, pancreático, hígado ovarios, entre otros.

Aunque continúan los estudios al respecto, la vitamina C en altas dosis también parece mejorar la calidad de vida en enfermos de cáncer. No sólo reduce la severidad de síntomas tales como vomitar, náuseas, cansancio, dolor y anorexia, sino que también eleva el humor y produce una mejoría total en la salud física.

Es importante saber que la reacción de la célula cancerosa a la vitamina C es variable, posiblemente debido a las variaciones genotípicas que determinan la presencia o la ausencia de enzimas tales como catalasa, que poseen resistencia a los efectos citotóxicos de la vitamina C.

Aunque las investigaciones no han mostrado pruebas convincentes de una conexión entre la vitamina C y la incidencia total del cáncer, el riesgo de cáncer de pecho era el 63% más bajo en las mujeres gordas que tenían una admisión de 110 mg/día de la vitamina C con respecto a las demás. Esto está por confirmarse.

El riesgo de cáncer de estómago se puede también reducir por concentraciones más altas de la vitamina C, reduciendo la producción carcinógena de N-nitrosoamine. La vitamina C es capaz de desactivar la ureasa de la enzima, que es importante en la supervivencia de los píloros de Helicobacter y de la colonización de la mucosa gástrica.

Puesto que esto es un factor de riesgo sabido para el cáncer gástrico, la profilaxis de la vitamina C pueden ser efectivas en la prevención. Sin Embargo, también reduce la acidez gástrica, así que puede ser considerada especialmente en pacientes sin achlorhydria.

La Vitamina C se puede administrar vía intravenosa u oral. La administración intravenosa lleva a niveles más altos de asimilación, puesto que desvía barreras intestinales de la amortiguación.

Vitamina C en profilaxis de la enfermedad crónica. La suplementación de la Vitamina C es también útil en la prevención de enfermedades crónicas, según algunos estudios.

Vitamina C y enfermedad cardiovascular. La Suplementación con vitamina C fue asociada a una reducción en el riesgo cardiovascular, incluyendo ataques del corazón. En un estudio que utilizó una medición exacta de la vitamina C biológicamente disponible, cada aumento en la concentración de la vitamina C del plasma por 20 μmol/L fue asociado a una reducción del 9% en riesgo del paro cardíaco.

La mortalidad total de todas las causas, enfermedad cardiovascular y cáncer (estes último solamente en hombres) muestra una asociación inversa fuerte con las concentraciones de la vitamina C del plasma, tales que para cada 20 μmol/L aumento de la concentración del plasma, había una disminución del 20% del riesgo.

Otra investigación mostró ciertas pruebas de la reducción importante en niveles de colesterol, pero ningún efecto sobre HDL cardio-protector. Los resultados parecen indicar que se requiere magnesio 400 o más vitamina C cada día para lograr bajar más el riesgo cardiovascular.

La suplementación de la Vitamina C (500 mg/día) parece tener ventaja en el tratamiento de condiciones tales como hipercolesterolemia, diabetes mellitus, hipertensión, enfermedad cardíaca coronaria, angina de pecho, e incidente cardiaco congestivo.

El Tratamiento con vitamina C mejora constantemente el flujo de sangre a los órganos vitales por la vasodilatación. Este nivel de suplementación por 8 semanas redujo la presión arterial en pacientes hipertensos. Asimismo, las mediciones de la vitamina C del plasma indican una asociación inversa entre la presión arterial y la concentración de la vitamina C.

Vitamina C y recorrido

Existen ciertas pruebas de que, niveles más altos de vitamina C están conectados a la reducción de aproximadamente 30% en el riesgo de recorrido. Esto ha sido confirmado por otros estudios, a condición de que los efectos beneficiosos puedan ser debido a los efectos salud-que refuerzan una dieta en frutas y verduras, que es a menudo la fuente primaria de la vitamina C. De hecho, los niveles de la vitamina C pueden servir como buen biomarcador para los factores de la forma de vida que reducen el riesgo de acciones cerebrovasculares.

Vitamina C e inmunidad

La Vitamina C estimula varias funciones inmunes, tales como movilidad y fagocitosis celular y resistencia al daño oxidativo. Si esto lleva a la función inmune superior en conjunto es un tema que sigue siendo objeto de estudio.

Utilizada para prevenir el resfriado común, la vitamina C acorta la incidencia de la misma a la mitad. La suplementación de la vitamina C reduce la duración de resfriados cerca de 14% en niños, pero el solamente 8% en adultos. No tiene ningún efecto clínico si es administrada después de sucedido el resfriado. La Vitamina C se utiliza a veces como tratamiento complementario en infecciones, tales como tuberculosis.

Vitamina C y otras dolencias

La incidencia de la gota mostró una asociación inversa constante con la suplementación de la vitamina C.

El riesgo de cáncer de colon se puede reducir con vitamina C dietética y la suplementación, como también el riesgo de linfoma non-Hodgkin.

Otras condiciones de la enfermedad que se relacionan inverso con los niveles dietéticos de la vitamina C (no suplemental) incluyen la Enfermedad de Alzheimer y las cataratas de los lentes oculares relacionados con los procesos de envejecimiento.

Fuente: news-medical.net

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