Alimentos verdes muy saludables

Alimentos verdes muy saludables

Bienestar Integral

Todos los alimentos proporcionan energía al cuerpo, pero esta energía puede variar mucho. Algunos alimentos, como los azúcares y los carbohidratos refinados, le dan al cuerpo una rápida sacudida de energía. Sin embargo y, bastante más a menudo, el cuerpo necesita más energía sostenible de ingredientes como frutas, granos y legumbres.

Por ejemplo, la siguiente lista se centra en los alimentos y bebidas que proporcionan energía más estable durante todo el día. Como los aguacates. Los aguacates son una fruta bien redondeada en términos de valores de salud y nutrientes. Como lo señalaba un estudio publicado en la revista Critical Reviews in Food Science and Nutrition, contiene nutrientes, proteínas y fibra que pueden ayudar a mantener los niveles de energía a lo largo del día. También contienen grasas buenas que pueden aumentar los niveles de energía y hacer que los nutrientes solubles en grasa estén más disponibles en el cuerpo.

No podemos olvidarnos de las manzanas. Las manzanas pueden ser otro bocado simple para darle energía duradera al cuerpo. Junto con la fibra y los nutrientes, un estudio en la revista Horticulture Research señaló que las manzanas tienen un alto contenido de antioxidantes llamados flavonoides, que pueden ayudar a combatir el estrés oxidativo y la inflamación en el cuerpo.

Las hojas verdes oscuras, como la col rizada, las espinacas y las hojas de berza, son densas en nutrientes y contienen proteínas de relleno, así como nutrientes y antioxidantes. Muy, muy recomendables.

Las verduras pueden ser difíciles de digerir crudas para algunas personas, por lo que descomponerlas cocinándolas con un poco de vinagre o jugo de limón puede ayudar.

Por otro lado, existen una serie de alimentos que deben evitarse. Mientras que la mayoría de los alimentos proporciona energía, hay otros que debemos evitar como:

– comidas rápidas o fritas
– azúcares añadidos
– aperitivos envasados
– dulces horneados como pasteles y magdalenas

Berza

Las berzas son parte de la familia de vegetales crucíferos. Contienen nutrientes que pueden desempeñar un papel importante en una dieta saludable. Los vegetales crucíferos son ricos en nutrientes y bajos en calorías. Una alta ingesta de alimentos vegetales, como las berzas, puede disminuir el riesgo de una serie de afecciones de salud, como la obesidad y la mortalidad general, la diabetes y las enfermedades del corazón.

Col rizada o kale

Repleta de nutrientes, la col rizada es uno de los alimentos más saludables del mundo. Los nutrientes que contiene ayudan a la piel, el cabello y a tener huesos sanos. El contenido de fibra mejora la digestión y contribuye a la salud cardiovascular. Con más valor nutricional que las espinacas, puede ayudar a mejorar el control de la glucosa en la sangre en la diabetes, disminuir el riesgo de cáncer, reducir la presión arterial y ayudar a prevenir el desarrollo del asma. Los nutrientes en la col rizada pueden ayudar a aumentar el bienestar y prevenir una variedad de problemas de salud.

Repollo

El repollo, que a menudo se agrupa en la misma categoría que la lechuga debido a su apariencia similar, forma parte -en realidad- de la familia de vegetales crucíferos. Las verduras crucíferas como la col, la col rizada y el brócoli son conocidas por estar repletas de nutrientes beneficiosos. El repollo puede ayudar a proteger contra la radiación, prevenir el cáncer y reducir el riesgo de enfermedad cardíaca. El color del repollo puede variar de verde a rojo y púrpura, y las hojas pueden ser lisas o arrugadas. Con menos de 20 calorías por media taza cocida, es un vegetal que vale introducir en nuestro plato. Muchos estudios han sugerido que aumentar el consumo de alimentos de origen vegetal como el repollo disminuye el riesgo de diabetes, obesidad, enfermedades del corazón y mortalidad general. También puede ayudar a promover una tez saludable, mayor energía y, en general, menor peso.

Aguacate

El aguacate tiene efectos antiinflamatorios en el cuerpo, ayuda a nuestra salud cardiovascular, promueve la regulación de azúcar en la sangre y también nos protege contra el cáncer. Además, las personas que consumen aguacate regularmente pesan menos y tienen un índice de masa corporal menor que los no consumidores. Es un alimento rico en grasas, pero saludables, además de poseer vitaminas, minerales y antioxidantes.

Pimiento verde

Los pimientos son una excelente fuente de vitamina C (contiene el doble que una naranja), vitamina B6 y vitamina E. Tienen un alto contenido en betacaroteno (o provitamina A) y vitaminas del grupo B2. Es ideal para prevenir la aparición de enfermedades degenerativas y crónicas, además de prevenir contra el cáncer, las hemorragias cerebrales, las cataratas, y las enfermedades cardíacas.

Pepino

Los pepinos contienen fibra, vitamina C, provitamina A y vitamina E; además tienen lariciresinol, pinoresinol y secoisolariciresinol, tres lignanos relacionados con un menor riesgo de enfermedad cardiovascular así como con varios tipos de cáncer, incluyendo el cáncer de mama, el uterino, el de ovarios y el de próstata. Además, tienen un alto contenido en agua y por tanto muy pocas calorías.

Manzana

Las manzanas contienen vitaminas y minerales con sugerentes beneficios. Poseen vitamina E y Vitamina C, además de ser ricas en fibra, que mejora el tránsito intestinal. A nivel de minerales, sobresale el potasio y el hierro, aunque en menor proporción. La vitamina E tiene beneficios antioxidantes e interviene en procesos tan deseados como la fertilidad. Las manzanas se caracterizan por tener mucha agua, ser ricas en pectina, funcionar como un buen diurético y aportarnos fibra y aminoácidos.

Kiwi

El kiwi es una excelente fuente de vitamina C (de hecho tiene el doble que una naranja) y también es rica en potasio, además de vitamina E y ácido fólico. Tomar kiwis, aparte de proporcionarnos una buena cantidad de fibra natural al organismo, protege nuestro organismo contra ciertos síntomas respiratorios tales como la respiración sibilante provocada por el asma. También ayuda a mejorar nuestro sistema inmunológico y a quemar calorías.

Judías verdes

Las judías verdes contienen una gran variedad de carotenoides (incluyendo el betacaroteno o la luteína) y flavonoides (como la quercetina o la epicatequina) que han demostrado tener propiedades antioxidantes. Además pertenece al grupo de los vegetales que contiene ácidos grasos omega-3, por lo que también nos aportan beneficios cardiovasculares.

Espinacas

Las espinacas tienen el doble de fibra que cualquier alimento verde. Es rica en vitaminas A y K, siendo también una buena fuente de hierro y ácido fólico. Se encuentra entre las verduras más sanas del mundo ya que provee de antioxidantes que nos ayudan con la salud de nuestro corazón, a luchar contra el cáncer, a fortalecer nuestros huesos, pelo y piel, nos ayuda contra el estrés, a prevenir el asma y a mejorar nuestra regularidad intestinal.

Coles de Bruselas

Las coles de Bruselas, que también pertenecen al grupo de las crucíferas como el brócoli, el repollo o la coliflor, son ricas en vitaminas C, E y A (en forma de betacaroteno o pro vitamina A) folato, potasio y fitoquímicos que combaten el cáncer. Estos vegetales ricos en fibra también son una buena fuente de aminoácidos.

Brócoli

El brócoli es una fuente natural de vitaminas A, C y K, así como de ácido fólico y calcio. Gracias a su composición, esta verdura crucífera nos ayuda en la quema de grasa, ya que tiene un alto contenido en fibra y un efecto saciante, con lo que es un buen alimento para controlar nuestro peso. Por si fuera poco, también es rico en fitoquímicos que combaten el cáncer.

Té verde

El té verde es tan positivo que se ha ganado un lugar en el grupo de los superalimentos. Es una bebida llena de antioxidantes que combate el cáncer (tanto el de piel, mama, pulmón, colon, esófago y vejiga) y reduce el riesgo de enfermedades cardíacas; al mismo tiempo nos ayuda a la digestión y acelera el metabolismo.

Fuente: muyinteresante.es

Alimentos
Entrada anterior
Toxina botulínica: pauta regulada en cuanto a su uso y aplicación
Entrada siguiente
Grasa localizada: ¿Qué tratamientos elegir?