El consumo excesivo de azúcar puede afectar la salud de la piel

El consumo excesivo de azúcar puede afectar la salud de la piel

Actualidad Médica

El azúcar puede dañar algunas variedades del colágeno cutáneo y acelerar el proceso natural de la piel llamado glicación, que ocurre cuando se adhiere a una proteína y forma nuevas moléculas dañinas llamadas AGEs, siglas en inglés de Advanced Glycation end Products.

De acuerdo a una investigación realizada por el Pond’s Institute, y en una nota titulada La verdad sobre cómo el azúcar afecta tu piel, la empresa cosmética asegura haber descubierto que a medida que se envejece las células del cuerpo se regeneran a ritmos mucho más lentos. En ocasiones, y de manera inconsciente, también el proceso de envejecimiento se puede estar acelerando al crear condiciones que hagan más lento el proceso de renovación celular y de producción de colágeno.

El colágeno es importante debido a que es la principal proteína estructural de la piel, responsable de hacer que sea firme por dentro, mientras le brinda un brillo y una apariencia juvenil por fuera. Existen muchos tipos de colágeno en la piel. De acuerdo con los expertos del Pond’s Institute, es posible que el azúcar dañe algunas variedades del colágeno cutáneo.

¿Qué pasa cuando se consume azúcar?

El consumir demasiado azúcar puede acelerar el proceso natural de la piel llamado glicación. Esto ocurre cuando en el torrente sanguíneo el azúcar se adhiere a una proteína y forma nuevas moléculas dañinas llamadas Productos Finales de la Glicación, más conocidas como AGEs, por las siglas en inglés de Advanced Glycation end Products.

Las AGEs dañan las proteínas en un efecto dominó. Entre más azúcar se consuma se producirán, al mismo tiempo, más AGEs; lo que significa, obviamente, más proteínas dañadas, precisamente las que ayudan a mantener la firmeza cutánea.

¿Qué ocurre cuando una proteína es dañada?

La glicación daña el colágeno y la elastina, las proteínas que, desde adentro, mantienen la piel firme, lisa y sin arrugas. Una vez que la proteína fue dañada, el colágeno y la elastina se rompen y se desconectan. Ello ocasiona que aparezcan líneas finas, arrugas y flacidez en la piel. Estos efectos comienzan usualmente a los 35 años de edad, incrementándose rápidamente.

Por otra parte, el colágeno glicosilado también puede formar estructuras compuestas que limitan los procesos de reparación y mantenimiento cutáneos. Cuando esto ocurre, la piel luce y se siente menos flexible y más propensa a la aparición de arrugas. Las AGEs inactivan las enzimas antioxidantes, haciendo que la piel sea más vulnerable. Por ejemplo, al daño provocado por los efectos del sol.

¿Cómo se puede revertir el daño que causa el azúcar?

Una forma de revertir el daño que causa el azúcar en la piel es facilitar la producción de colágeno, utilizando, por ejemplo, productos que contengan retinoides. Asimismo, y para reducir la producción de AGEs, también se debe reducir la cantidad de azúcar que se consuma.

Respecto a la alimentación, se debe procurar tener una dieta baja en carbohidratos o bien optar por el consumo de granos enteros y arroz integral. Estos alimentos liberan el azúcar lentamente, lo cual reduce la tasa de glicación y mantiene la piel sana.

Fuente: cosmetologas.com

azúcar, Piel
Entrada anterior
El rol del agua alcalina en el envejecimiento
Entrada siguiente
Uso del móvil y desarrollo de nuevas patologías en el pulgar